Lo cierto es que la cría de tortugas en cautividad es relativamente difícil, ya que no todas las especies son capaces de reproducirse si no están en su hábitat natural, aunque el terrario que hayamos creado se asemeje mucho. Sin embargo sí hay especies que pueden reproducirse con más facilidad, algunas de ellas incluso en acuarios.
Por ello en las siguientes líneas analizaremos los cuidados que necesitan las crías de tortugas, cuidados que por otra parte son diferentes a los que necesitan las tortugas adultas. Si tienes crías en tu hogar o si has adoptado a pequeñas tortugas, nuestra serie de consejos te ayudará a cuidar de las tortugas jóvenes.
Preparación del hábitat
En primer lugar es importante preparar el lugar donde van a vivir nuestras tortugas en sus primeras semanas de vida. Este lugar perfectamente puede ser una ubicación temporal, ya que es bastante común optar por acuarios/terrarios pequeños inicialmente ya que son más fáciles de mantener.
Es importante que en este espacio temporal no haya mucha agua, sobre todo cuando no se traten de tortugas acuáticas, ya que podemos correr el riesgo de que éstas se ahoguen. El nivel de agua no debe ser superior a la altura del cuerpo de las tortugas para evitarnos cualquier tipo de susto.
Características del hábitat
En su nueva casa, ya sea temporal o permanente, la tortuga debe tener una especie de plataforma (como una rampa) que le permita a la tortuga moverse con libertad entre las dos zonas. Superar obstáculos será una tarea difícil en una fase muy temprana, por lo que la colocación de rampas le ayudará a superarlos.
Una lámpara de rayos UV también es una parte esencial en este tipo de alojamiento. Como les ocurre a todos los animales de sangre fría, es importante que puedan recibir rayos de sol para sobrevivir. La lámpara ser vital, sobre todo, para los que no tengáis posibilidad de ofrecerles horas de sol.
No obstante las primeras semanas cuidado con que reciban demasiados rayos UV, porque en exceso podríamos provocarles quemaduras.
Alimentación
La alimentación de las pequeñas tortugas puede componerse principalmente de carne: insectos, gusanos, etc. Cuando alcancen una edad más adulta las verduras serán su alimento principal.
Además de la carne, ofréceles también complementos específicos para crías de tortugas. Esta alimentación les proporcionan gran parte de los nutrientes necesarios para su desarrollo.
Cambios en su hábitat
Conforme las pequeñas tortugas vayan desarrollándose, iremos agregando componentes a su hábitat como plantas, añadiremos más agua (más profundidad), haremos cambios en su dieta, etc. Todo a un ritmo gradual, siempre teniendo en cuenta el tamaño de las crías.